martes, 24 de marzo de 2009

La exageración oficial

Hace unos días publiqué una artículo titulado Estoy casi bien en el que decía que la Medicina no puede decir que alguien está sano sino solamente que alguien «parece estar sano».

No solamente la salud es algo muy incierto y difícil de diagnosticar (a pesar de que todos desearíamos fuertemente que eso fuera posible) sino que la Organización Mundial de la Salud (OMS) tiene desde hace décadas una definición que complica aún más las cosas.

Dice: «La salud (del hombre) es un estado de perfecto bienestar físico, mental y social, y no sólo la ausencia de enfermedad».

Esto es un verdadero disparate y los invito a compartir la siguiente reflexión:

«Perfecto bienestar físico, mental y social»: ¿No les parece que es una expresión de deseos que se escapa del ámbito natural del ser humano? ¿Quién razonablemente puede aspirar a tener algo «perfecto»?

«…y no sólo la ausencia de enfermedad», que es justamente lo único que nos puede decir la Medicina: «no encontramos ninguna anomalía», «para los médicos está todo bien», «tiene una salud sin particularidades».

En suma: 1) Todos desearíamos tener certeza sobre si estamos sanos o enfermos; 2) La medicina sólo puede decir que ella no encuentra anomalías dignas de mención pero no puede diagnosticar que alguien está sano; 3) La OMS propone una definición de salud tan ideal, utópica e inalcanzable, como para que todos nos sintamos más enfermos que sanos.

Conclusión: todas las circunstancias parecen favorecer que nuestra preocupación por la salud esté un poco por encima de lo razonable (exacerbada).

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17 comentarios:

Anónimo dijo...

Entonces pasamos mal en cierto modo porque en nuestras sociedades se proponen como modelo cosas inalcanzables y siempre nos sentimos en falta.

Anónimo dijo...

Para mí es un negocio. Si te dijeran que te conformes con cualquier cosa, no comprarías nada, serías una conformista ahorrativa. Tenés que buscar la salud perfecta así te gastás todo lo que tenés en los médicos, farmacias, gimnasios, ropa deportiva.

Anónimo dijo...

No sé qué pasa con los demás, pero para mi estar enferma no es algo novedoso ni tan preocupante. Nací así y para mí tomar remedios, hacer tratamientos, cumplir dietas, esperar horas en consultorios de doctores que llegan a cualquier hora, es mi vida. No conozco otra cosa.

Anónimo dijo...

Hace años había leído esta definción de salud de la OMS pero no me había dado cuenta que es utópica, ideal, exagerada, como usted dice.

Siempre me pareció lógica, pero ahora veo que me pone un referente que x supuesto me obliga a estar siempre suponiendo que no estoy sana sino "un poco enferma".

Anónimo dijo...

Definición sanducera (Paysandú, Uruguay) de salud: Si me siento bien, estoy sano; si me siento mal, estoy enfermo.

Comprendó que a veces lo más sencillo es lo más difícil de ver.

Anónimo dijo...

Comparto ampliamente la opinión de la sanducera.

Anónimo dijo...

No puedo creer que la OMS siga divulgando esa definición, tenía entendido que la habían modificado para que los objetivos de salud no se convirtieran en utopías inalcanzables (y para que los números dieran porcentajes más alentadores)

Anónimo dijo...

¿Quién mide el perfecto bienestar? ¿el médico? ¿el paciente?
¿Alguien logró el perfecto bienestar como para reconocerlo en otro?

Anónimo dijo...

El primer mundo es hipocondríaco y el tercer mundo hipocalórico.

Anónimo dijo...

A mí me parece importante que se señale que la salud no es sólo la falta de enfermedad, que es algo más. Podés no tener nada, aparentemente, y ser la persona más desgraciada del mundo. Eso no puede ser salud.

Anónimo dijo...

Doy un ejemplo apoyando lo que plantea el artículo: después de los 40 años nadie tien la vista perfectamente sana, sin embargo eso es lo normal.

Anónimo dijo...

Javier equipara sano con normal, cuando se trata de cosas distintas. Es normal resfriarse en invierno, aunque no es sano.

Anónimo dijo...

Imagino mi angustia si la primera vez que llevo a mi bebé al pediatra él me dice con una mueca de duda: "parece estar sano"

Anónimo dijo...

La tecnología médica ayuda a diagnosticar enfermedades con mayor prontitud. Recordemos que no hay límites para el avance de la tecnología. O sea que cada vez se va a ser más exigente para otorgar el carné de salud. Y cada vez la gente deberá cuidarse más, restringirse más y trabajar más por su salud. Por lo tanto aumentará el malestar de vivir en un entorno cultural y vamos a ser socialmente menos felices.
La cosa no tiene arreglo.

Anónimo dijo...

La definición de la OMS está hecha para que sólo alcance Dios la perfecta salud. Así el muy sádico podrá seguir presionándonos, con el argumento de que fuimos hechos a su imágen y semejanza.

Anónimo dijo...

Yo tengo algo perfecto: mi osito!

Anónimo dijo...

¡Mentira que para los médicos está todo bien! No te dejan pasar una. Que la sal, el azúcar, las grasas, la presión, el sobrepeso, el sedentarismo, el cigarro, el alcohol, etc.