Pasaron varios años para que la novela de Pablo Ponciolo empezara a tener lectores. Más que nada lectoras.
Este señor es un fanático de los estudios esotéricos, de las artes adivinatorias, de la parapsicología, usuario de la magia negra (cuando no tiene más remedio) y también informático.
Algunos podrían pensar que esta rama del saber pertenece casi exclusivamente al grupo de los racionalistas, pero no, no es así,. La mayoría quizá lo sean pero existe un subgrupo integrado por gente muy espiritual. Es sabido por unos pocos (e intuido por muchos), que en el fondo la informática conduce a un gran misterio.
Ponciolo escribió su libro utilizando sus conocimientos de astrología con la peregrina idea de que cada lector leyera en realidad su autobiografía.
Efectivamente, el libro es sólo digital y requiere para el acceso a su capítulo primero que el lector llene todos los campos que incluyen nombres, apellidos, lugar, fecha y hora exactos de nacimiento y algún otro dato que ahora no recuerdo.
El hecho es que el libro tenía como protagonista al lector (con su nombre, género, etc.). Cada texto se generaba en el momento en que el usuario ingresaba con su clave y era interesante encontrar algunas coincidencias con la vida pasada y actual de cada uno.
Cabe recordar que un libro digital que corre en la web puede ser modificado permanentemente por quien posea la contraseña para editar el texto.
El hecho es que Pablo Ponciolo continuó sus estudios y perfeccionamiento de la novela-biografía hasta que llegó un punto en que el grado de coincidencia empezó a ser llamativamente elevado. Además, cada texto incluía algunos eventos que ocurrirían en los días siguientes a la consulta.
Lo que hizo que esta obra fuera retirada de circulación fueron precisamente estos aciertos hacia el futuro personal de cada uno de los lectores, pero no porque el autor «adivinara» el futuro, sino porque los lectores (sobre todo lectoras) más ávidos, caían en profundos estados de sugestión que los llevaba a provocar inconscientemente lo que ellos suponían que era su destino inexorable.
Para peor el espíritu de Pablo Ponciolo es muy tenebroso y prácticamente no daba tregua a los pocos que se animaban a poner sus datos personales correctos.
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19 comentarios:
¡Qué bueno! Ya me aboco a crear un libro así. Tengo todo lo necesario.
¿Habrá habido algún suicidio por lo del libro?
Con esa carita, Ponciolo es esotérico o es sorético. jaja
Este relato es una burla solapada a quienes creemos en la existencia y poder del espíritu.
Advierto a los lectores para que confirmen esta suposición.
Estoy re-segura de que todo esto puede ser y me parece que Samanta está un poco chapita de más.
Estoy de acuerdo con Samanta, el Licenciado es diplomáticamente irónico con lo desconocido para él.
¡Así que la mayoría de los que leían esas estupideces y se sugestionaban eran mujeres! ¡Sexista!
la idea de este Ponciolo es divertida, pero como sé que soy sugestionable mejor no me meto.
Parece que lo mejor de Pablo Ponciolo fue su persistencia.
Lo que ud. asocia con espiritualidad siempre es material de 3ª
A Pablo en el liceo le decíamos el huevo. Coincidía la forma de su cabeza con lo difícil que resultaba entenderlo.
Lo difícil es ser racionalista y no toparse con el misterio. Como decía Sócrates: "cuanto más se, más se que no se nada"
Licenciado ¿Pablo Ponciolo es pariente suyo? Los ojos son idénticos.
Estoy de acuerdo con ud acerca de la fuerza de la sugestión. Además valoro que logra transmitir esa idea de manera clara y ágil a través del relato.
A mí me pasó al revés que a este señor Pablo. Los escasos aciertos acerca del futuro personal de mis clientes terminaron sacándome de circulación.
Para obtener venganza utilizo la magia blanca y para favorecer a mis hermanos, la magia negra.
Quiero que pronostiquen el futuro de mi vida basándose en estadísticas y argumentos lógicos...no, mejor no.
Este chico Ponciolo ¿cómo se llama? ¿Pablo, Pedro, Pablo Pedro o Pedro Pablo ?
Mi astrólogo siempre me da "pum para arriba"
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