viernes, 3 de noviembre de 2017



ORIGEN

(Micro historia sin levantar el lápiz)

Un muchacho volvía de su viernes licencioso. Caminaba por la misma vereda angosta de siempre, cuando desde una puerta asomó el mango de una escoba que le impedía seguir caminando. Se detuvo y luego de unos segundos apareció la cara de una muchacha despeinada que le dijo: “Te conozco y quiero que me hagas un pibe”.

Mi mamá fue siempre así para todo.