domingo, 23 de junio de 2013

Una pareja natural



 
Él está en una playa escuchando su radio con auriculares; ella, bajo otra sombrilla, se divierte tirando una pelota de goma hacia arriba y atajándola.

Una maniobra equivocada en este juego hace que la pelota ruede hasta la sombrilla del desconocido.

Él toma la pelota y cuando ella se la pide, pone una cara de niño enojado muy bien actuada, esconde su mano detrás de la espalda y le dice: «¡E mía!».

Ella no puede contener la risa y le dice con tono de niña tímida: «¿Jugamos?».

Él hace un brevísimo gesto de desconfianza y le tira la pelota, ella la toma y se la devuelve, así muchas  veces, hasta que por mirarse a los ojos se olvidan del juego y comienzan una conversación del tipo «¿cómo te llamás?», «me gusta tu sonrisa»; «sos linda».

La llaman por el celular, atiende brevemente y dice: «Me voy. Mandame un mensaje al 099.999.999, así guardamos nuestros números».

A los dos días él la llama y le pregunta: «¿Te gusta la carne asada?»; «Sí, bastante»; «Yo vivo en Los Pinos, ¿estás lejos para venir?»; «Más o menos a 20 minutos, ¿voy?»; «Sí, te espero».

Se reúnen, comen, se acarician, hacen el amor, hablan de cine y ella se va para su casa.

Cinco días después él la llama a las tres de la mañana, ella contesta medio dormida y él le dice: «Me desvelé, ¿puedo ir a dormir ahí?»; «Sí, vení». Terminan durmiéndose a las siete de la mañana porque se desvelaron los dos.

Cincuenta y tres años después él muere; ella le acaricia el cuerpo que se enfría y se pone rígido.

(Este es el Artículo Nº 1.937)

2 comentarios:

Julia. dijo...

Muy "natural": radio, auriculares, sombrilla, pelota, celular, cine....Notable !

Julia. dijo...

Muy "natural": radio, auriculares, sombrilla, pelota, celular, cine....Notable !