Como las fantasías
inconsciente son inconscientes porque son desconocidas, sólo podemos sugerir
que algunos deseos homosexuales masculinos buscarían el amor materno.
Los deseos homosexuales
masculinos, permanentes u ocasionales, satisfechos o no, podrían estar causados
porque la psiquis está organizada de tal forma que, por esa vía el varón goza.
Lo expresaré de otra forma:
las preferencias personales seguramente tienen alguna causa, conocida o
desconocida. Si bien «Sobre gustos no hay nada escrito», son
atendibles algunas hipótesis que podrían explicar por qué algunos varones gozan
fuertemente recibiendo el semen de otro varón en su recto (mediante coito anal)
o en su boca (mediante felatio).
Algunos niños de sexo masculino sueñan con ser más amados por su mamá.
Este deseo, como cualquier otro, está fuera de su control. Él solo aspira a que
su mamá no ame a otra persona más que a él.
Los humanos podemos fantasear pensando que el ingreso en el aparato
digestivo (por la boca o por el ano) de cierta sustancia, puede provocarnos una
transformación.
Esta fantasía participa intensamente cuando ingerimos medicamentos o
cuando apelamos a los supositorios. Si creemos en las bondades de ese
medicamento intentaremos su incorporación.
El pequeño enamorado puede pensar que el padre posee algún don con el
que le saca esa ventaja que tanto lo perjudica. Ese hombre tiene algo que la
mamá prefiere y que el niño no tiene.
Con esa parte primitiva que todos tenemos, el pequeño puede fantasear
con que si pudiera incorporar el semen de su papá (por la vía oral mediante una
felatio o por la vía rectal mediante un coito), podría adquirir el encanto que
seduce a la madre.
Como las fantasías inconsciente son inconscientes porque son
desconocidas, sólo podemos elaborar hipótesis y sugerir que algunos deseos
homosexuales masculinos buscarían el amor de una mujer.
(Este es el Artículo Nº 1.996)
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