Imaginemos un penoso accidente. Un joven comete el error de cruzar la calzada de manera notoriamente imprudente y un automovilista lo atropella causándole daños físicos y psicológicos de importancia.Este desafortunado joven es hijo de un juez penal y cuando el automovilista es llevado a juicio para determinar cuál es su grado de responsabilidad en el accidente, el caso le es asignado al padre del accidentado.
¿Usted considera que es correcta esta decisión del Poder Judicial o debió asignarse el caso a alguien que no tuviera un vínculo afectivo ni con el accidentado ni con el automovilista?
Creo que estaremos de acuerdo en la respuesta. Un juez involucrado afectivamente con alguna de las partes carecería de la neutralidad que requiere su función.
Este caso es muy claro y todos podemos entenderlo con facilidad. Sin embargo existen otros casos en los que esa decisión se torna mucho más difícil. Por ejemplo, cuando uno hace comentarios que provocan en quien los oye una reacción inesperada e inclusive con derivaciones lamentables.
El dicho popular «No hay que mencionar la soga en la casa del ahorcado» resume bien lo que procuro comentar. Cuando observamos con preocupación que alguien nos trata mal, cabría investigar si no habremos tocado algún punto sensible que desencadenó una reacción objetivamente injusta pero subjetivamente comprensible. Volviendo al principio, si el juez tomara el caso podría dictaminar injustamente la culpabilidad del automovilista
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19 comentarios:
Hay otro refrán que dice "Quien se quema con leche, ve a una vaca y llora".
Hay personas que se ve que han pasado por todas las desgracias de la humanidad porque no es posible seguir con ellas alguna conversación coherente.
No creo que le asignen un caso a juez padre del accidentado, pero me parece que el juez que lo tome probablemente se interese por proteger los intereses de su compañero de trabajo porque, a la vuelta, él puede necesitar la misma preferencia.
No creo nada en la justicia, ni la terrenal ni la celestial.
Estuve reparando una PC en una casa donde hay un ambiente raro. El señor vive con su hija pero se comportan como si fueran un matrimonio y estuve a punto de comentar el caso del austríaco que había secuestrado a su hija con quien tenía varios hijos.
Muchas noticias están escritas de tal forma que el padre siempre abusó de su hija pero no se dice qué edad tenía la hija cuando empezaron a tener sexo porque seguramente hay muchas relaciones incestuosas adecuadamente consentidas porque ella es mayor de 18 años.
Quedé muy extrañada porque la suegra de un amigo se puso furiosa cuando hice un comentario sobre la violencia doméstica.
Después ellos me explicaron que hacía años que la señora estaba en tratamiento psiquiátrico precisamente por lo traumática que había sido su vida de casada.
Algunas personas utilizan el aborto como un método anticonceptivo y con ese tema tienen unos rollos terribles.
Una vez un amigo me contó cómo se organizaba la empresa en la que trabajaba como vendedor, haciendo una ficha de cada cliente. Ahí ponían los temas predilectos, los temas totalmente prohibidos, los que predisponían a cerrar la venta.
Tuve una amiga por muy poco tiempo porque casi cualquier tema lo relacionaba con que su padre había matado a su madre en una golpiza.
Esto de la violencia familiar es todo un tema. En una revista para hombres vi, en la parte de los chistes, lo que ellos llamaban el "Test Tyson" donde supuesta en broma te ofrecían un cuestionario con múltiple opción sobre cómo aleccionar a una mujer. Horrible. Ahora soy yo el que no quiere hablar de eso.
Mi suegro tuvo que mentir cuando se quedó sin trabajo porque no se animó a decirlo y estuvo disimulando no sé cómo durante varios meses. Eso causó mucha vergüenza en su familia: no que el hubiera mentido sino que lo hubieran despedido.
Estoy contigo Pamela, yo tampoco puedo creer en la justicia. Estoy muy decepcionada de casi todo.
También hay algunos que se creen tan importantes que casi cualquier tema del que se hable siempre se sienten aludidos.
Un poco va en uno también, si cualquier reacción fuera de lugar que tiene otra persona, si cualquier acusación que se le ocurre hacernos, la vamos a tomar como válida, legítima y normal, entonces el problema es nuestro. Lo que yo hago es escuchar atentamente, cuando oigo algo fuera de tono, hago de cuenta que en lugar de hablar está ladrando y le doy el mismo tratamiento que si fuera un perro: lo ignoro.
Un par de años de discusiones inútiles me tomé para darme cuenta que a mi marido no se le puede criticar lo mismo que él critica. Es monopolista: Si él lo ataca, no hay que atacarlo también y si él lo defiende, no hay que defenderlo también. Le molesta perder la exclusividad en determinadas posiciones y oponiones.
En todo lo demás es amoroso, pero esa complicación casi me cuesta el divorcio.
Ojo que también algunos se enojan porque les gusta enojarse. No buscan tener un motivo. Se enojan cuando tienen ganas. Tienen incontinencia enojadil (lo acabo de inventar - disculpen - jeje)
Los periodistas tienen muy desarrollado el olfato para saber de qué tienen que hablar con cada entrevistado, tanto sea para complacerlo como para ponerlo furioso. Son malignos... pero divertidos. Los buenos parecen tontos.
Adoro a mi novio pero es muy celoso el pobre y de a poco voy quitando todos los nombres masculinos de mi repertorio. Sólo quedan habilitados el de mi padre y el de mi hermano. Por ahora.
Los tipos celosos me hacen gracia cuando se preocupan de los competidores de su mismo sexo sin darse cuenta que puede perder como en la guerra con alguien del opuesto. Hablo por experiencia así que lean bien: ojo con los/las colegas de género.
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