martes, 20 de mayo de 2008

Rubia azabache

Los recursos aptos para mejorar la calidad de vida no responden al sentido común, ni a la lógica, ni al deber ser, ni a la razón. Responden al deseo humano que es notoriamente alocado.

Mi parte femenina (Fernanda) conoce bastante bien a mi parte masculina (Fernando) porque hace años que viven juntas y se llevan muy bien.

Para lograr este confortable matrimonio observo cómo Fernanda se comporta más bien como una rubia tonta aunque es muy inteligente.

Se comporta como si fuera ingenua porque Fernando se derrite de amor cuando ella lo espera y lo come a besos pero además le pide que por favor le abra la lata de duraznos en almíbar porque «estos aparatos fueron hecho por y para los hombres».

Cada vez que ellos tienen una ducha romántica, ella se sonroja porque nuevamente tiene que preguntarle cuál es la canilla del agua caliente y «¿para qué lado era que se abría?».

El disfruta sintiéndose superior, tolerante, indulgente y siente que tiene unos deseos desenfrenados de penetrarla una y mil veces.

Claro que cuando Fernando está enfermito, Fernanda se recicla y se convierte en una madre protectora y autoritaria hasta que él sane. A partir de ahí, ambos retoman sus roles habituales.

En este esquema, se supone que la comedia erótica se mantendrá divertida hasta que la muerte los separe.

El modelo también es aplicable a la pareja en la cual ambos roles están encarnados por dos personajes individuales.

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7 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Cómo será estar casado con Julieta Prandi? ES DIVINA. LA AMO. VENITE PARA EL URUGUAY GUACHA!!!

Anónimo dijo...

Te cuento que si mi mujer me espera porque no sabe abrir una lata, la mando a la mierda por imbécil. ¡No me jodas licenciado!

Anónimo dijo...

Yo necesito distintas mujeres para distintos momentos del día y para distintos días de la semana. No soy lo mismo recién levantado que cuando llego muerto de cansancio a las 10 de la noche. No soy el mismo el sábado de mañana que el domingo de mañana.

Voy a estudiar para jeque árabe a ver si arreglo el asunto éste porque en la Argentina encuentro trabas legales.

Anónimo dijo...

Julieta Prandi no me la banco porque me parece que es una nena caprichosa que te puede dejar en la ruina en un par de horas. Prefiero a Mercedes Sosa que parece más tranqui.

Anónimo dijo...

Qué te deja hablar tan libremente de tu parte femenina y masculina? Estas liberado? Estás psicoanalizado? Sos gay?

Anónimo dijo...

Cuando estaba fanatico del cine me miré una cantidad de filmes norteamericanos de la década del 50donde la mujer funcionaba más o menos así. Las italianas todo lo contrario.

Anónimo dijo...

Como artículo de ficción está bueno. Si fuera académico no lo compartiría en absoluto.