Está claro que el sentimiento opuesto al amor, es el odio. El opuesto a la alegría es la tristeza. Pero ¿cuál es el sentimiento opuesto a la envidia?Daré mi opinión pensando que alguno de ustedes me informe cuál es la palabra que significa la no-envidia.
Por si eso no sucede, diré que cuando falta un vocablo es porque algo raro nos sucede a los humanos con eso que se queda sin ser bautizado.
Para describir el estado en que queda un hijo que pierde a alguno de sus padres, tenemos la palabra «huérfano», pero no tenemos vocablo para el estado en que queda uno de los padres cuando pierde un hijo.
Cuando falta la palabra que define una cosa, una situación, un sentimiento, podríamos pensar que eso que queda innominado sencillamente no se puede nombrar, tiene alguna particularidad que lo vuelve innombrable.
Estas reflexiones me hicieron pensar que quizá no exista un sentimiento opuesto a la envidia porque todos somos envidiosos, en mayor o menor medida.
Como no existe el sentimiento no existe la palabra.
Es curioso sin embargo que no hace falta que la cosa o hecho exista en la realidad para que exista la palabra. Sin ir más lejos el vocablo inmortal es muy común a pesar de que nada es inmortal. El simple deseo de que haya algo que nunca pierda la vida, nos hace crear la palabra que lo represente.
Pero el sentimiento opuesto a la envidia parece que no existe ni en nuestra imaginación.
Seguramente que podemos decir indiferencia o conformidad, pero éstas son demasiado genéricas. Carecen de la precisión que existe en las oposiciones odio-amor o tristeza-alegría.
Quedo a la espera de que alguno de ustedes me rectifique como ya lo han hecho tantas veces.
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15 comentarios:
Amor, benevolencia.
En psicoanálisis podría decirse que la IDENTIFICACIÓN es algo opuesto a la envidia.
No creo que en la identificación quede siempre afuera la envidia; hasta es posible que en algunos casos suceda todo lo contrario. Para identificarte con alguien tiene que estar presente el deseo de ser como esa persona, y cuando otro es algo que nosotros todavía no somos, es muy frecuente que surja la envidia.
No sé si será exactamente lo opuesto a envidia, pero quizás pueda ser la admiración, aunque sospecho que en la admiración también se mezcla la envidia.
Es una buena pregunta cuestionarse acerca de cuál será la particularidad que lleva a que algo no tenga nombre. En el caso del estado en que queda alguien cuando pierde un hijo, parecería que es el dolor lo que vuelve a ese estado innombrable.
Es posible que la envidia no tenga un opuesto, que existan otros estados del alma diferentes a la envidia pero no necesariamente opuestos, como el desinterés o el desprecio.
Es raro, tendría más lógica que no existiera un vocablo para denominar la envidia, ya que es un sentimiento que complica mucho las relaciones humanas. Cuando las cosas se nos complican demasiado muchas veces negamos, pero con la envidia no pasa eso; bah! por lo menos, quiero decir, le pusimos nombre.
Creo que la niña puede identificarse con su madre y seguir sintiendo envidia del pene.
El interés por algo o alguien puede incluir la envidia. Por el contrario el desinterés siempre excluye a la envidia. De pronto es difícil encontrarle un contrario a la envidia porque este es un sentimiento que aparece casi siempre o siempre, mezclado con otros.
El concepto envidia define a un sentimiento muy particular y sutil, a la vez que muy claro y fuerte. No creo que tenga un contrario tan específico e intenso.
Hay cosas que no tienen su contrario. El contrario de hombre no es mujer, ni tampoco al revés.
Jóven tiene un contrario que es viejo, pero niño o adolescente tampoco tienen contrario.
Creo que es cierto lo que ud afirma de que todos somos envidiosos. Porque a todos nos falta algo, y quizás sea imposible vivir la falta sin aunque sea un poquito de envidia.
Me quedé pensando en lo que dice Estefanía. A lo mejor no queremos nombrar aquellas cosas, estados o sentimientos que involucran una falta poco evidente, una falta que es más del inconsciente que de la conciencia.
Hola, ¿Cúal es el opuesto del perdón?
Adriana
El amor desinterasado nos permite entregar,confiar en nosotros,valorarnos,el no aferrarnos.Esa clase de amor excluye a la envidia.
Lo contarario del perdón es el rencor.
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