jueves, 1 de julio de 2010

Los buenos son un poco malos

¿Usted admitiría la existencia de una buena conducta imperdonable?

La expresión está asociada fuertemente a una «mala conducta», pero no con una buena, y esta falta de costumbre, sirve para desconocer, ignorar, descalificar la idea de que alguien deba ser condenado por buena conducta.

El caso es relativamente sencillo y se explica en pocas palabras.

Si en un grupo de trabajo, un colectivo, una organización, alguien hace las cosas demasiado bien, le está causando un problema al resto que cumple con los estándares de la mayoría.

En las cuadrillas de trabajadores, siempre existe algún líder que cuida la uniformidad del grupo, tratando de que nadie muestre desempeños superiores al resto.

Los personajes sobre-salientes, también son perturbadores. Denuncian indirectamente que otros están retaceando su habilidad, esfuerzo o preocupación.

La buena conducta no consensuada (no aprobada por la mayoría), equivale a un acto de traición que justifica la correspondiente sanción.

Esto no sería así en el caso de un grupo de personas que deban alcanzar un objetivo riesgoso, en el que uno se exponga a encarar las misiones más peligrosas, en beneficio directo de quienes se mantienen en mejor resguardo, cuidando su integridad.

Hacer las cosas mejor que los demás también es una buena conducta imperdonable si lo observamos desde el lado opuesto.

Cuando los niveles de calidad, excelencia, rendimiento, esfuerzo, son promedialmente bajos (por ejemplo, en el ámbito estudiantil, en los mercados, entre los funcionarios de una institución), más personas podrán calificar para conservar su puesto (como estudiante, agente económico o trabajador, respectivamente).

Quiere decir entonces, que el mal desempeño, la mediocridad, la mala conducta (no delictiva), desciende el nivel de expectativa y de esa forma, más personas pueden ser incluidas, integradas socialmente, rescatadas de la marginalidad.

En suma: los mejores desempeños, tienen aspectos positivos y también negativos.

●●●

11 comentarios:

Morgana dijo...

Imagine todo el mal que puede hacer una hermana demasiado linda.

Matilde dijo...

Hay personas que suben el nivel del grupo y otras que provocan la huída por vergüenza masiva.

Roque dijo...

Los padres eligen los colegios para sus hijos de acuerdo al desempeño de sus hijos.

el oriental dijo...

En el fútbol también festejamos de acuerdo al nivel de expectativas.

Hipólito dijo...

Los chicos que tienen facilidad para los estudios, muchas veces deben ocultarla para ser aceptados por el grupo.

Estela dijo...

En casa siempre consensuamos la buena conducta, pero las misiones más difíciles las sigue encarando mamita.

Facundo Negri dijo...

Tenemos todo nivelado como para rescatar de la marginalidad a millones de personas, pero siempre que se mira hacia abajo, sigue habiendo espacio.

Marta dijo...

En cualquier oficina, lo habitual es que el grupo de funcionarios no acate todas las órdenes del jefe. De tanto en tanto aparece uno que sí lo hace y se descalabra todo.

Yoel dijo...

Los sobresalientes le recuerdan al resto la mediocridad predominante.

Emiliano dijo...

Si sos muy bueno en algo, mas vale que trates de representar a otros, como ser parte de una selección... en fin, lo que sea que te permita compartir la gloria. Así es más fácil eludir la envidia.

Rulo dijo...

Habría que multar a todos los que no respetan la ley del mínimo esfuerzo.