Algunas personas transgreden las recomendaciones del médico como si hicieran una travesura por la que serían amonestados si el médico se enterara.
Freud inventó una forma exitosa de pensar
nuestra psiquis.
Su éxito obedece a que la lógica que tiene lo
que aún seguimos llamando el «aparato psíquico» permite explicar coherentemente una cantidad de
fenómenos, que de otra forma seguirían atormentándonos con esa angustia que nos
provoca ignorar cómo funciona aquello que nos rodea e influye.
No es que
el invento de Freud sea verdadero, simplemente nos permite explicar cómo quizá
funcione nuestro pensamiento y esto será así hasta que aparezca otra forma de
explicarlo mejor.
Pero por
ahora contamos con este precario recurso (el psicoanálisis).
En otro
artículo (1) les describí cómo podríamos imaginar ese funcionamiento psíquico
según la creativa imaginación de Freud.
En este
esquema, el YO es el jefe, el INCONSCIENTE es un depósito lleno de ideas,
deseos, intenciones, instintos, fantasías, todos ellos reprimidos porque si
quedaran «sueltos» nos impedirían convivir en sociedad y el SUPERYÓ que se
dedica a mantener el orden interno, disciplinarnos, obligarnos, controlar
nuestra moral, a portarnos bien.
El YO, el
jefe, es muy importante (como en cualquier otra organización) y si no tiene el
suficiente temperamento, todo andará mal, la eficiencia general decae, el
titular de dicho aparato psíquico tiene problemas.
Por
ejemplo, cuando los impulsos del INCONSCIENTE incluyen un deseo de conservar el
estilo de vida infantil y el YO, con la ayuda del SUPERYÓ, no logra dominar ese
impulso del INCONSCIENTE, ocurre, por ejemplo, que el titular de ese aparto
psíquico supone que el médico le hace recomendaciones porque lo cuida como si
fuera su mamá, y para confirmar esta fantasía, transgrede esas recomendaciones
pensando que perjudica al médico y que este, si se enterara, lo retaría muy
enojado.
Otras menciones del concepto «aparato
psíquico»:
(Este es el
Artículo Nº 1.575)
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12 comentarios:
Ser amonestados por el médico, nos reafirma en la idea de que el médico es como nuestros padres. Nos reta para cuidarnos. Y nosotros cuando niños, sentíamos bronca, al mismo tiempo que confirmábamos el amor de nuestros padres, cada vez que nos retaban.
Supongo que existen también otras formas exitosas de explicar nuestra psiquis, además de la propuesta por el psicoanálisis.
Qué enorme angustia provoca no saber lo que nos pasa!!! Preferimos que nos diagnostiquen a soportar la incertidumbre.
A veces nos confundimos y pensamos que la libertad es dejar que los impulsos inconscientes fluyan. Creo que es al revés. Si esos impulsos señorearan en nuestra conducta, estaríamos enfrentados a grandes problemas.
No entiendo nada. No está bueno reprimir, pero hay que reprimir. El autoritarismo nos hace mal, pero resulta que nos ayuda a vivir en sociedad. Es todo muy confuso.
Son muchos los adultos que conservan el estilo de vida infantil.
Mi madre es diabética y come dulces a escondidas. Me resulta patético. No puedo respetar a una mujer que se comporte así.
Tu madre se comporta como si vos fueras su padre. Qué lío!!
Si decide comer lo que le hace mal, es cuestión suya, no tendría que esconderse.
Capaz que la madre de Joaquín quiere que su hijo la proteja. Ella no lo sabe, pero todavía no es una persona adulta.
Los hijos debemos proteger y cuidar a nuestros padres, así como antes ellos lo hicieron con nosotros.
Depende, Evangelina, estoy de acuerdo contigo si es en situaciones en las que ellos no pueden valerse por si mismos.
Evangelina diente una roca en vez de cerebro. Si la agarro la mato. (es un decir)
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