lunes, 6 de junio de 2011

Los varones desechables

Mujeres y suegras procuran inconscientemente traer niños a su familia, utilizando a un varón que ni se imagina cómo lo usaron.

Aunque la mujer padece una sobrecarga por tener que gestar y luego alimentar con su cuerpo a los nuevos ejemplares de la especie, algún beneficio suficiente recibe a cambio porque, entre quejas y lamentaciones, siguen embarazándose. (1)

Los varones por nuestra parte, si bien parecemos más aliviados, igualmente tenemos actitudes que denuncian un deseo creativo muy fuerte.

Que históricamente (los varones) nos hayamos encargado de grandes obras, empeños muy esforzados y de pelear hasta morir, son hechos que pueden interpretarse como el afán de ser útiles, creativos, gestores de contribuciones tan importantes como las que hacen las mujeres con su útero y sus senos ... (2) pero perdemos el tiempo: jamás las alcanzaremos en grandeza porque nada es más valioso que otro ser humano.

Por ahora la tecnología no ha resuelto definitivamente que las mujeres puedan prescindir de los varones.

Llegará un día que, así como un test de embarazo (imagen) puede hacerse en la casa comprando un producto de precio accesible, también podrán fecundarse en su casa del varón que elijan en un catálogo.

La aproximación a ese trágico (para los varones) final, hace que ellas, inconscientemente, se «enamoren» de un hombre, se casen con él, tengan uno, dos o tres hijos, y luego les pidan el divorcio «por riñas y disputas» exigiéndoles una pensión alimenticia que alimente los hijos que tuvieron con ellas.

A esta novela puedo agregar a la madre de ella, que inconscientemente ayude a traer esos nietos que alegren su menopausia.

En suma: sin culpa ni pecado, algunas mujeres sólo quieren ser fecundadas por el varón que les parezca genéticamente mejor dotado (3) y luego lo abandonan para disfrutar de esos hijos (y nietos) tan deseados.

(1) La naturaleza sobrecarga a las mujeres

(2) El embarazo de ambos sexos

(3) «A éste lo quiero para mí»

«Soy celosa con quien estoy en celo»

El celoso cuida su vida

Artículo vinculado:

Las jefas de hogar crían hijos pobres

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13 comentarios:

Maruja dijo...

Deje de victimizar a los varones. Válgame Dios!

Corina dijo...

Desarrollando los bancos de semen, y manteniendo alguna colonia de padrillos, se puede prescindir del hombre, cómo no.

Cecilia dijo...

Como dice mi nunca bien ponderado Silvio Rodríguez:
"Eva sale a cazar
en celo.
Eva sale a buscar
semilla.
Eva sale y remonta
vuelo.
Eva deja de ser
costilla".

María dijo...

No estoy para nada de acuerdo con todo esto. Adoro a los hombres y me parecen irremplazables. Como mujeres los necesitamos y los disfrutamos. Ustedes nos hacen sentir plenas.

Lautaro dijo...

Vamo arriba María! Esa es una mujer con todas las letras.

Blanca dijo...

Usted no leyó el libro "Las mujeres que aman demasiado"?.
El libro es una porquería, pero todo lo que dice es verdad.

Braulio dijo...

La realidad es así como dice Mieres. No nos dejemos llevar por lo que sucede con porcentajes poco significativos de mujeres. Ellas hacen y deshacen. Dicen que nosotros las usamos para ocultar que es justamente al revés.

Mirna dijo...

Ya me imagino ese catálogo!
En la página central, Forlán, Messi y Woody Allen.

Alicia dijo...

Nosotras inconscientemente nos enamoramos, eso es verdad. Hay que ser bien inconciente.

Zulma dijo...

El final trágico le cuento cual es: la pensión alimenticia nunca llega.

Mercedes dijo...

En el catálogo incluyan a Brad Pitt y a Mr. Músculo, porfis!

Anónimo dijo...

¡Nada que ver...!!
La cultura no empieza ni termina con nosotros... Y si no: pregúntenle a los musulmanes...!!!

marta dijo...

para qué casarse si el objetivo es tener hijos?

no olvides la clonacion, aun no funciona con humanos pero ya llegará el dia.estamos en la edad del narcisismo, el otro no importa o está para ser utilizado y descartado.no otra cosa hacen los hombres desde siempre,cuando tienen sexo solo por descarga.

la pregunta es: Y el amor?

la otra pregunta es: y los hombres q abandonan a su mujer e hijos, para irse a fecundar alegremente a otra?