Hace dos años vendí mi
auto porque la saturación de vehículos en Montevideo la volvieron
intransitable. El intendente y su enorme burocracia tratan infructuosamente de
facilitar el transporte colectivo. Quizá podrían construir grandes
estacionamientos en las diferentes entradas a esta ciudad con ómnibus, taxi y
remises que permitan el ingreso minucioso de los visitantes.
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