sábado, 22 de septiembre de 2007

¡Carísimo! ... pero muy barato

Repasemos brevemente todo lo que un psicoanalista no es para su analizante:

Amigo (compinche, cómplice, secuaz)
Familiar (padre, madre, hermano mayor, tutor)
Asociado (socio, afiliado, adepto, correligionario)
Adherente (afiliado a sus ideas, postulados, causas, reivindicaciones)
Solidario (fusionado con sus dificultades para vivir o soportarse)
Anexo (complemento sano de alguien que se siente enfermo)
Devoto (sumiso, subordinado, admirador, obsecuente, incondicional)
Consejero (profesor, guía, maestro, mentor, instructor, director, rector)
Protector (guardián, ángel, vacuna, compañía de seguros)
Referente (enciclopedia de la vida consultable para cualquier duda)
Modelo (personaje perfecto al que hay que imitar)
Supervisor (responsable de los actos y omisiones del analizante)
Legislador (dictador de normas de conducta, recetador, guía espiritual)
Juez (quien dice qué es correcto o incorrecto y luego puede condenar o absolver)

Mirándolo bien, estos profesionales parecería ser que no hacen muchas cosas para cobrar lo que cobran, pero ¡atención! la genialidad de esta técnica consiste precisamente en que nadie, excepto un psicoanalista, es capaz de creer en la sabiduría del analizante, porque está seguro de que el malestar que lo trajo a la consulta es el resultado de un desconocimiento transitorio entre lo que es capaz de hacer y lo que realmente está pudiendo hacer. Su tarea es recordarle la contraseña con la que podrá acceder a su tesoro personal. ¿Habrá alguien más que cobre tan poco por entregar algo tan valioso?

reflex1@adinet.com.uy

●●●

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Genial !!! Realmente genial, lo imprimo y me lo llevo a casa.

Una de las que te quiere

Anónimo dijo...

Mis felicitaciones: muchos escritores reconocen la necesidad de definir un concepto, comenzando por deslindar lo que "no es".
Me cuestiono...
Por casualidad si Ud. pretende "devolverle" la "contraseña de la propia sabiduría interior" a su "cliente",¿no debería contar con su confianza ex aequo?
Y si el cliente no alcanzara una autoconfianza, (en sí mismo), mayor a la que tiene en Ud.,¿no podría tardar años en "descubrir su propia contraseña"?
¿Cómo le devuelve la autoconfianza a quien la ha extraviado en ciertas relaciones tumultuosas, peca de tímida e introvertida?
Gracias por compartirme sus múltiples aciertos: realmente deja la sensación de alguien con gran empatía. (Lo cual, curiosamente, no se deduce fácilmente de su retrato fotográfico). Bye!!!